¿Por qué los edificios necesitan una reparación de fachadas? Esto es debido a que, con el paso del tiempo, los diferentes agentes climatológicos como la lluvia, el granizo o los daños estructurales hacen que las fachadas se deterioren.
Una inspección técnica de edificios a tiempo puede resultar beneficiosa y hacer que la vida útil de los edificios sea más larga. Es por eso que es recomendable cada cierto tiempo realizar tareas de rehabilitación de fachadas, lo que ayudará a que el edificio tenga un buen mantenimiento y conservación.
Una fachada en pésimas condiciones no solo afecta el aspecto y las paredes del lugar, también genera otros problemas como pérdida de estanqueidad y calefacción, aparición de humedad, condensación o hundimiento.
¿Qué es la reparación de fachadas?
La reparación de fachadas consiste en sanear o revestir una estructura que está desgastada y puede crear una capa de humedad. La exposición constante a elementos contaminantes, al humo de los vehículos y a los cambios del clima, son factores que provocan daños en las fachadas de los edificios o las viviendas, afectando la estética, la habitabilidad y la seguridad.
Las fachadas, más allá de la estética, tienen funciones muy importantes para un edificio como el aislamiento térmico y la protección del interior contra agentes externos nocivos. Por ello, es fundamental mantenerlas en buen estado para garantizar la seguridad y el confort de las personas que hagan vida en el inmueble.
Ventajas de la reparación de fachadas
Contratar una empresa con varios años de experiencia es fundamental, ya que permite realizar un análisis rápido de la fachada y valorar qué materiales va a necesitar el edificio. A continuación vamos a ver algunas de las ventajas de la reparación de fachadas.
Mejorar su apariencia exterior
Esta es la principal ventaja de la reparación de fachadas. Con una mano de pintura, nuestro edificio puede cambiar mucho estéticamente, dando sensación de fiabilidad y fortaleza. Pero no solo se necesitará pintura, si es la primera reparación de fachada en muchos años puede que se necesite reparar ciertas grietas y desperfectos provocados por el paso del tiempo y por el clima y esto puede suponer un peligro, ya que se pueden desprender materiales y dañar a las personas.
Obtener una certificación energética que sea superior, una de las ventajas de la reparación de fachadas
El aislamiento térmico que se consigue con la reparación de la fachada puede hacer que se obtenga una certificación energética superior y esto se debe a la instalación de fachadas ventiladas, que no solo mejoran el aislamiento térmico, sino también el aislamiento acústico.
Al contar con un aislamiento térmico de calidad, las comunidades de vecinos utilizan menos la calefacción y el aire acondicionado y, con ello, se reducen las emisiones de carbono a la atmósfera.
Recuperar o aumentar el valor de la vivienda
La reparación de fachadas puede hacer que el valor de la vivienda aumente considerablemente y sea más atractivo para nuevos compradores en la zona. Esto está muy enlazado a las dos primeras ventajas, si se dispone de una buena eficiencia energética y una buena apariencia, se puede pedir más dinero en el caso de venderla propiedad.
Aumenta su accesibilidad, otra de las ventajas de la reparación de fachadas
En muchas ocasiones no solo basta con reparar la fachada, sino también en realizar obras de accesibilidad. La habitabilidad del inmueble muchas veces se ve perjudicada por la dificultad de acceso a la vivienda o a la calle, especialmente para algunos de los grupos más vulnerables, como los mayores o población con problemas de movilidad. En este sentido, la instalación de un ascensor ayuda a convertir al edificio en un espacio seguro, al prevenir caídas en escalones, al mismo tiempo que aporta un mayor confort a la hora de trasladar el carrito del bebé o la propia compra.
Mejora la calidad de vida de los residentes, entre las ventajas de la reparación de fachadas
La reparación de fachadas provoca que mejore la calidad de vida de las personas que residen en un edificio, ya que con la mejora de la eficiencia energética van a tener un ahorro en gastos de calefacción y aire acondicionado, además de estar mejor aislados acústicamente con los ruidos del exterior. También, al instalar un ascensor, mejora notablemente la vida de los vecinos con movilidad reducida, evitando posibles caídas.
Sabemos que el coste de este tipo de obras es considerable y hace que las comunidades de vecinos duden en realizar este tipo de obras, pero existen diferentes ayudas económicas que pueden suponer un ahorro del 30% en la reparación de fachadas.
Está claro que una buena rehabilitación de fachadas ofrece un sinfín de beneficios. Entre otras cosas, mejora la gestión energética de los edificios y aumenta el confort y la seguridad de los vecinos. Además, propicia un salto estético importante que redunda en una revalorización de las edificaciones. Una apuesta segura a la sostenibilidad y la conservación de nuestras ciudades.
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